Los motivos de esta situación es
que Gallo ha sido el último en entrar en el mercado
debido a las dudas iniciales sobre la rentabilidad de
este segmento del mercado. Inicialmente estaba planificado
entrar en este segmento con la adquisición de El Pavo
que finalmente no se realizó, por lo que finalmente,
se firmó un acuerdo con la empresa italiana Fini para
la fabricación de este tipo de pastas y salsas bajo
fórmulas propias diseñadas por Gallo adaptados al gusto
del consumidor español. No se ha optado inicialmente
por la fabricación propia dado que se trata de un mercado
todavía sin consolidar que a juicio de la empresa no
compensa la elevada inversión en maquinaria necesaria.
Sin embargo pese a esta entrada tardía en el segmento,
Gallo ha incrementado rápidamente su cuota de mercado
(hasta alcanzar el citado 10%) gracias sobre todo a
la correcta definición del nuevo producto y a la gran
imagen de marca adquirida en los últimos años. En la
actualidad la empresa comercializa seis tipos de pasta
rellena y cinco de salsas.
Fuente: Elaboración
propia a partir de Actualidad Económica, Junio 2002.
Cuestiones:
1.- ¿Qué ventajas supone para Gallo
su estructura verticalmente integrada?
2.- Gallo ha optado por una estrategia
de “esperar y ver” ante la aparición de un nuevo segmento
del mercado, ¿qué posibles inconvenientes puede acarrear
esta estrategia?.
3.- ¿Qué ventajas e inconvenientes
tiene ser pionero en un determinado mercado?
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